Estanques con Vida. Segunda Parte.

La creación de charcas es útil para el mejoramiento de los paisajes y las áreas de esparcimiento de la población, para generar microclimas en jardines y zonas agrícolas, en la recuperación de la calidad de las aguas superficiales además de ser una herramienta para la conservación de especies que viven o dependen de puntos de agua dulce para su supervivencia, compensando la destrucción y degradación de charcas por el hombre.zafarraya-ppal-575x323

Cómo construir una charca o estanque.

En primer lugar debemos ELEGIR EL LUGARMuchas veces no tendremos mucha libertad para escoger la zona en la que construiremos nuestro estanque. Aún así, siempre que exista la posibilidad de escogerla, deben tenerse en cuenta los siguientes aspectos:

Disponibilidad de agua no contaminada. Las  charcas deben ser construidas preferentemente en lugares donde exista de forma natural, la posibilidad de retención de agua limpia.

Los lugares con mayor potencial para la creación de charcas son aquellos con suelo poco permeable, donde se acumula agua de lluvia de forma natural y donde una excavación no requiere de mucho esfuerzo. En aquellas zonas donde la lluvia es más escasa, deben aprovecharse las fuentes y nacientes existentes para crear charcas. Busca áreas húmedas, próximas a nacientes. Minas, pozos, fondos de valles, o piensa en la posibilidad de recoger agua de los tejados.

Cuando la charca es abastecida por agua de escorrentía superficial, es importante conocer el origen del agua y las posibles fuentes de contaminación, pues la buena calidad de una charca depende mucho de la calidad del agua que recoge.

Hábitat terrestre de los alrededores – La construcción de nuevas charcas debe ser llevada a cabo, preferentemente, en lugares rodeados por áreas naturales o rurales  o conectados a ellas; de lo contrario, se corre el riesgo de no llevarse a cabo la colonización natural de la charca por especies salvajes o que no exista un hábitat terrestre que soporte la fijación de una población de anfibios.

Proximidad de otras charcas – Para la conservación de la biodiversidad de las charcas, es preferible la creación de un complejo de charcas permanentes, estacionales y temporales en lugar de charcas aislados. Construye charcas próximas a otras zonas húmedas, favoreciendo de esta forma la conectividad entre poblaciones y la colonización natural de las nuevas charcas.

Historia del lugar – Crear una charca en el mismo lugar o próxima a donde en otro tiempo ya existió una, puede facilitar su recolonización por especies que ya hayan existido anteriormente, y también ayuda a recuperar poblaciones locales de anfibios cuyos lugares de reproducción hayan sido destruidos.

Potenciales corredores ecológicos – Construye la charca en lugares que puedan funcionar como corredores ecológicos, conectando de esta manera diferentes poblaciones aisladas de especies que dependan del medio acuático (anfibios, invertebrados, plantas acuáticas). Es particularmente importante conectar pequeñas poblaciones aisladas en áreas urbanas (ejemplo: jardines y parques urbanos) que de otro modo tenderían a desaparecer.

Especies raras – Construye la charca próxima a lugares donde existan especies poco comunes que dependan de charcas, ayudando de esta manera a aumentar sus poblaciones o su área de distribución.

Buena exposición solar – Es importante que la charca tenga buena exposición solar, no debiendo ser construida en lugares permanentemente bajo sombra, aunque puede tener algunas zonas sombreadas. La luz solar permite un mayor desarrollo de la vegetación acuática y de las algas responsables de la purificación y oxigenación del agua. La radiación solar permite el calentamiento del agua, acelerando el desarrollo de las larvas de los anfibios, aunque en lugares con mucho viento y en climas más secos, puede aumentar la evaporación, pudiendo secar el charco.

Aprovechamiento de la radiación reflejada. – Al pensar en la localización de una charca, recuérdese el posible aprovechamiento de las condiciones creadas por ella. Cuando una charca es creada al sur de un edificio, la luz solar reflejada en la superficie puede ser aprovechada para aumentar la luminosidad y la temperatura del edificio en el invierno, reduciendo los consumos energéticos. Este efecto puede ser también aprovechado en huertas, manzanares o jardines, para aumentar el crecimiento y la productividad de las plantas que exigen más luz.

Considera no excavar– No excaves charcas en lugares donde existan especies o hábitats valiosos, raros, amenazados o protegidos por ley, ni en donde sea susceptible destruir patrimonio arqueológico. Las charcas construidas en áreas naturales distantes de zonas húmedas o aisladas en áreas urbanas, tal vez no sean colonizadas o lo serán más lentamente, por la poca conectividad con otras poblaciones.

La siguiente fase es PLANIFICAR la construcción de la charca. Para ello tomaremos en cuenta los siguientes elementos:

Reconocimiento del lugar – Lo ideal es hacer un mapa que incluya el máximo de detalles. Para ello, debe realizarse una visita al lugar y realizar un esquema anotando el tipo de vegetación, agrupamientos vegetales, distancia entre los árboles, presencia de agua, existencia de piedras, caminos, etc.

Dibujar o diseñar la charca – Veinte cabezas piensan mejor que una. Durante esta etapa de la planificación, puede ser útil proponer a la comunidad su participación en el diseño de la charca. Más que un concurso de diseños en el que gana el mejor, deberá ser realizada una fusión de las mejores ideas presentadas.

Tamaño – Es preferible crear varias charcas pequeñas y de tamaño medio que una grande. Si es imposible crear varias charcas, piensa en crear una charca de tamaño pequeño o medio, fácil de mantener y monitorizar. Charcas de 2 a 100 metros cuadrados pueden considerarse un tamaño suficiente. La cantidad de agua disponible en el lugar condicionará también el tamaño de la charca.

Tamaño de la charca

Es preferible crear un complejo de charcas con diferentes tamaños, profundidades, formas e hidroperíodos que crear una única charca grande. Cuanta mayor sea la diversidad de los hábitats, mayor será la biodiversidad que el lugar consigue alojar.

Diversidad e irregularidad – En la planificación de una charca para la conservación de la biodiversidad, “diversidad” debe ser la palabra clave. De esta manera, debe crearse una gran diversidad de formas y condiciones de tal manera que se favorezca la presencia de las más variadas especies. Zonas más hondas, otras menos hondas; zonas expuestas y zonas más abrigadas; zonas de vegetación emergente, de vegetación flotante,  sin vegetación, áreas con sol, áreas con sombra. Debe evitarse a toda costa, que la charca sea homogénea, recta o demasiado simple. En la creación de complejos de charcas, lo ideal es diseñar varias charcas con diferentes tamaños y niveles de profundidad, unos permanentes, otros temporales, para así favorecer la presencia de diferentes especies de anfibios.

Poca profundidad – No es necesario crear charcas muy profundas, son suficientes entre 20 cm y 1 metro de profundidad. Las charcas poco profundas se calientan más con la radiación solar. Por otro lado, en regiones más frías, la profundidad deberá ser superior a 50 cm, de lo contrario, existe el peligro de que la charca se congele totalmente en el invierno, matando a todos los seres que viven en ella. En todo caso, lo ideal será la existencia de una zona más honda (hasta 1 m), aunque la mayor parte de su extensión deberá tener profundidades más reducidas (menores de 20 cm).

Lo siguiente es CONSTRUIR la charca.

Preparación del terreno – Marca en el lugar el contorno del área a excavar con estacas unidas por un cordel o haciendo una pequeña zanja. Remueve la vegetación y la capa superficial del suelo en el área a excavar y, en caso de que el lugar se encharque con frecuencia, guarda la capa superficial del suelo y las plantas para reponerlas al final. A pesar de no parecer apropiado eliminar la vegetación del entorno, en algunas ocasiones puede ser necesaria la remoción, o al menos una poda de la vegetación circundante de manera que puedan realizarse el resto de las acciones.

Calendario – El momento óptimo para construir la charca es al final del verano o al inicio del otoño (en aquellos países con cuatro estaciones bien marcadas).  Lo ideal es conocer bien cuáles especies existen en el lugar y sus respectivos ciclos de vida para evitar que la intervención en la charca no acarree consecuencias negativas para estas.

Excavación – No son necesarias infraestructuras grandes ni costosas, sólo simplemente excavar un poco para hacer una pequeña depresión en el suelo capaz de retener agua. Se recomienda el uso de un nivel. Las charcas pequeños podrán ser excavadas a mano, lo que provocará menos impacto sobre la fauna y flora locales que si se utilizara maquinaria pesada. Comienza por excavar la parte más profunda del charco.

Abrigos – Las piedras o troncos encontrados durante la excavación pueden ser amontonados en los márgenes o formar islas en el centro de la charca, convirtiéndose en un abrigo ideal para la fauna y reduciendo la acción de los depredadores de los anfibios. Muros de piedras sueltas (sin cimiento) junto a la charca o en su proximidad crean también buenos abrigos.

Impermeabilización.

La creación de charcas no implica obligatoriamente la aplicación de telas de impermeabilización. Si el objetivo es crear charcas de agua limpia para la vida salvaje, la forma más sustentable y económica es utilizar fuentes naturales de agua limpia sin necesidad de utilizar materiales de impermeabilización. La dependencia de la hidrología natural implicará una fluctuación natural de los niveles del agua y, por tanto, algunas charcas podrán secarse en los meses secos, más esto no es un problema para la vida salvaje. Las charcas temporales, estacionales o que sufren grandes fluctuaciones del nivel del agua son importantes para un gran número de especies y son un hábitat muchas veces ignorado.

En la práctica, la colocación de revestimientos impermeables permite la creación de charcas en áreas donde la hidrología o la geología no permiten su formación natural o cuando existe una buena razón para mantener la charca aislada del agua subterránea, por ejemplo, donde el nivel freático se encuentre contaminado. Existen, sin embargo, desventajas significativas en la utilización de la impermeabilización artificial: las charcas son más costosas de crear, más susceptibles a daños y a la pérdida súbita de agua.

Charcas en terreno arcilloso – En la construcción de charcas sobre terreno arcilloso la impermeabilización consistirá apenas en la compactación del fondo, ya que la arcilla compactada es un excelente impermeabilizante, siendo también más ecológico (local, natural y reciclable) y económico.

Charcas en terreno permeable con un nivel freático próximo a la superficie– En el caso de las charcas excavadas en lugares donde el nivel freático es elevado, no es necesario su impermeabilización pues es precisamente la permeabilidad del fondo la que va a garantizar la rapidez en el llenado de la charca.

Charcas en terreno permeable y nivel freático bajo – En estos casos, para la creación de una charca que retenga agua el tiempo suficiente para permitir la fijación de organismos acuáticos, es necesaria la colocación de materiales impermeabilizantes. Los suelos demasiado permeables no son los ideales para la creación de charcas ya que pueden exigir mucho esfuerzo y recursos para garantizar que el agua se mantenga en ellos aún con un revestimiento impermeable, pues toda el agua de lluvia puede infiltrarse directamente, no existiendo escorrentía superficial de las aguas.

Colocación de geomembranas, telas o mantas impermeables: Si es fundamental la impermeabilización de la charca para que las pérdidas se reduzcan sólo a las generadas por la evaporación, será necesario colocar algún revestimiento impermeable. Para eso, el primer paso es retirar las piedras, los palos y demás materiales que puedan dañar la lámina. Es recomendable revestir la excavación con arena de río y colocar sobre ésta una manta o geotextil para dar uniformidad al terreno y evitar daños en la membrana que se colocará a continuación. La membrana deberá ser mayor que la charca, debiendo cubrir tanto el fondo como las paredes y los márgenes. Si se impermeabiliza con una tela lisa, la tierra que la cubre podrá deslizarse hacia la parte más honda, impidiendo el crecimiento de plantas en el borde y algunos animales podrían tener dificultad para salir, muriendo ahogados. Para evitar que esto ocurra, podrá emplearse una tela con superficie rugosa o alternativamente, una capa de geotextil o de fibra de coco sobre la tela lisa, para evitar el deslizamiento de la tierra.

Revestimiento – Para proteger la tela o plástico de impermeabilización, reducir su efecto visual y sobretodo, facilitar la colonización de plantas acuáticas y la fijación del suelo, se recomienda colocar una capa de geotextil sobre toda la estructura, el fondo y las paredes. La charca puede además ser cubierta con piedras, gravilla, arena o suelo mineral, para darle un aspecto más natural y facilitar la colonización.

Llenado del agua – Si la charca fue planificada próxima a una fuente de agua o en un lugar en el que se prevé la acumulación natural del agua de lluvia, basta esperar que la charca se llene naturalmente. En el caso de que la charca sea construida próximo a edificios, podrán usarse canales para recoger de los tejados agua de lluvia y conducirla hacia la charca. Si sólo se cuenta con la opción de llenado con agua de red pública de abastecimiento de agua, déjala reposar por al menos 24 horas en un recipiente abierto para que pierda el cloro antes de colocarla en la charca.

Finalmente, la etapa de la COLONIZACIÓN de la charca.

Colonización natural – La nueva charca debe ser colonizada naturalmente por la fauna y flora locales, sin intervención humana, aunque esta colonización pueda demorarse más de un año en hacerse visible. Algunas especies pioneras prefieren charcas recientes, con agua pobre en nutrientes y prácticamente desprovistas de vegetación y de predadores.

Colonización facilitada – En el caso de que se pretenda facilitar la colonización de una charca, puede mejorarse el hábitat que la rodea con el fin de atraer más especies de animales o mejorar los corredores ecológicos para las especies que se pretende atraer. Por ejemplo, se pueden eliminar las barreras para que los anfibios puedan desplazarse, crear áreas periféricas con árboles autóctonos, colocar alimentadores para aves y cajas nido, etc. Atrayendo las aves, se acelera la colonización del charco, ya que éstas pueden transportar en las plumas, en las patas o en los excrementos, semillas de plantas acuáticas y huevos de invertebrados acuáticos.

Colonización artificial – La colonización puede ocasionar diversos problemas, como la introducción accidental de especies exóticas, enfermedades o parásitos o contaminación genética. Sin embargo, en el caso de que sea necesario colonizar artificialmente la nueva charca, esta colonización debe llevarse a cabo con especies recogidas en los hábitats acuáticos más próximos y nunca comprando plantas en viveros o trayéndolas de lugares distantes. Cuando se pretende colonizar artificialmente una charca, existen un conjunto de cuidados que deben tenerse en cuenta para evitar problemas:

  • No intentes introducir animales antes de tener establecida una comunidad de productores primarios (plantas, algas, fitoplancton) ya que podrían morir por falta de alimento. Introduce primero plantas recogidas en una charca próxima y algo de agua de esa charca, para facilitar la colonización por vida microscópica.
  • Para evitar introducir accidentalmente semillas no deseadas, enfermedades o parásitos junto con la tierra y las raíces de las plantas, coloniza la charca por semillero, recogiendo semillas de plantas acuáticas en charcas próximas, esparciéndolas sobre la charca y en los márgenes.
  • No recojas plantas ni captures animales en charcas próximas sin certificar si existen restricciones legales para su captura o si son especies invasoras. La introducción de plantas y animales exóticos al igual que peces, tortugas, etc., pueden llegar a aniquilar por completo la fauna local de charcas, lagunas y riberas. 

La información contenida en esta entrada ha sido extraída de la página web de la organización CHARCOS COM VIDA, la cual te invito a revisar (en portugués).

Si te interesa conocer más de la construcción de charcas, te recomiendo el Manual de Creación de Charcas para Anfibios editado por Reforesta y la Comunidad de Madrid.

En este video encontrarás instrucciones muy precisas de cómo construir una charca en casa aplicando los principios de la Permacultura.

Y AQUÍ verás cuáles plantas puedes colocar en tu estanque y la forma correcta de hacerlo.

El arrullo ancestral de las charcas.

Los habitantes de las ciudades hemos olvidado el sonido de la naturaleza. De forma progresiva los seres que poblaban sus áreas verdes se han visto obligados a emigrar, en la medida en que dichos espacios son sustituidos por hormigón y cemento; ya no recordamos haber escuchado el sonido de las cigarras en verano o los grillos en las noches luego de un fuerte aguacero.

Sin embargo, las charcas en patios, parques, jardines y huertos comunitarios de nuestras ciudades nos permiten volver a darle la bienvenida a esta maravillosa biodiversidad. Vamos a animarnos a construir pequeñas charcas y nos sorprenderemos de los resultados.

cover170x170Nuestros pueblos indígenas conocen como nadie la importancia de mantener este delicado equilibrio con la Tierra. Te invito a que escuches a la cantante y compositora argentina de música ancestral infantil Graciela Mendoza cantando Takuarí porá, canto de arrullo guaraní, maravilloso testimonio de cómo suena una charca, un bosque, la naturaleza. ¡Que lo disfrutes!

Graciela-Mendoza